Cuando Katerin Marrero logró salir de la tienda Harris Brothers, luego de que se estremeciera el piso, los cristales temblaran y recibiera una llamada diciendo que el hotel ubicado en la esquina de su casa había explotado, pensó que había perdido a su hijo. Partamos de la base de que no es justo meter a todos los aficionados en este saco pues, como también se puede ver en el vídeo, varios hinchas con la elástica rojiblanca no dudaron en recriminar la actitud de aquellos que amedrentaron a ambos madridistas.