Su uso es considerado como un indicativo de elegancia y relevancia deportiva, siendo usados para algún acto solemne, por lo que algunos eran incluso bordados en oro. En 2010, el uruguayo Diego Forlán reconoció que cuando iba a salir del Manchester United en 2004, quería fichar por el club rojiblanco. Griezmann, hoy titular: «Hoy entendíamos que tenía que jugar de inicio. Hizo un gran esfuerzo, porque jugó primero delante y después en el costado».